ΑΠΟ ΤΗ ΝΤΟΥΛΑΠΑ ΣΤΗ ΣΚΗΝΗ. Η ΓΚΕΪ ΟΠΕΡΑ

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Del armario al escenario: la ópera gay
Un nuevo libro ofrece una perspectiva gay del mundo de la ópera

Joel Lorca (naciongay)

La primera impresión que uno arrastra cuando cierra la última página de "Del armario al escenario: la ópera gay" es el hecho de que se trata más de una obra de divulgación que no de un ensayo o un estudio. Dicho de otro modo, la atractiva narración de Adolfo Planet, junto a la ironía que a menudo no puede evitar, convierten a su libro en una lectura entretenida apta para todos los públicos, más que una obra dirigida a un público especializado. Ideal para leer un domingo por la tarde, la obra se entreteje a base de anécdotas, como la de la famosa soprano Adelina Patti, cuyo coche se cruzó con el de Isabel II por las calles de Madrid. El cochero se detuvo para dejar paso al de la reina de España. La Patti, contrariada, no pudo ocultar su instinto de diva, y gritó a su cochero: "¡No aguardes! ¡Pasa! ¡Yo también soy una reina!". Y es que en la ópera, como en tantas instancias, hay demasiadas reinas para tan pocas coronas.

La voluntad de Adolfo Planet parece ser la de pintar un sencillo lienzo del mundo operístico: un poco de historia, algunos cantantes, el repertorio gay-lésbico básico... Ello a menudo provocará que el libro sea demasiado general, con demasiados vacíos, pero también lo convertirá en una distraída lectura. Cinco capítulos vertebran "Del armario al escenario". El primero planteará una reflexión general sobre la cuestión gay en relación con la ópera y su mundo para proceder después, en el capítulo segundo, a mostrarnos qué es exactamente una diva, una prime donne. El autor tiene la oportunidad aquí de rebañar el plato y arrancarnos unas cuantas sonrisas, y no la desaprovecha: ¿cuáles son las características de una diva? ¿cómo se fraguó el star system a la ópera y se trasladó luego al mundo del cine, el pop...? ¿cuáles son los puntos de contacto entre la diva y lo que supuestamente se entiende como "la diva gay"?

No debe pensarse que el autor es aquí vulgar, él ha dejado muy claro en el primer capítulo que se dispone a hacer una lectura "rara" de la ópera, no pretende sentar doctrina. Se supone que Adolfo Planet no cree en absoluto que los gays sean todos unas divas, pero sí aprovecha el tópico (y a veces no tan tópico) para trazar dicha relación. Y el tema de la diva debía conducir a uno de los capítulos mejor trazados de todo el libro, el dedicado a Mari(c)a Callas, a la que Planet llama "diosa titular". El capítulo dedicado a la soprano más conocida de todos los tiempos cuenta anécdotas fascinantes, incluida la opinión de Callas respecto a la orientación sexual (muy moderna, ella, que solo corrían los años 70). Después de dedicar un capítulo a las voces masculinas, especialmente al fenómeno de los castrati, en el capítulo quinto el autor tratará de ofrecernos el "repertorio gay" de la ópera, eso es, todas las óperas que son susceptibles de ser leídas "de algún modo, en clave gay".

Lo mejor, y lo peor...

Lo mejor que puede tener un ensayo es despertar una inquietud, y en el caso que nos ocupa parece que Adolfo Planet cubre las expectativas. El lector avanza entre sus páginas con ganas de escuchar los fragmentos de ópera de los que el libro nos habla. Lo dicho, lectura ideal para un domingo por la tarde. Además, el capítulo dedicado a María Callas es lo mejor de la obra (se lee en un plis-plas), y el repertorio operístico gay es indispensable, pues significa la seguramente única aportación auténtica del libro a los estudios gay-lésbicos en español, aunque hay que señalar que dicha aportación sería mejorable. No obstante, el libro es general en exceso y algunos capítulos tienen un sentido discutible. El dedicado a las voces masculinas y a los castrati, por ejemplo, tiene un encaje extraño dentro de la estructura y el plan general de la obra. El enfoque general o la intención divulgativa no pueden excusar, además, los vacíos o desequilibrios que a menudo se observan en la obra.

Por otra parte, apuntar que un índice onomástico sería de una utilidad extrema. Su ausencia refuerza aún más el hecho de que "Del armario al escenario: la ópera gay" no es tanto una obra de consulta como un libro excelente para pasar un buen rato, echar unas risas y conocer una aproximación original al mundo de la ópera. En conclusión, un libro perfecto para regalar a ese amigo al que le encanta acudir al Liceo o al Teatro Real. También adecuado para aquellos que deseen expandir su horizonte musical.